Policía capacita a jóvenes de Centro de Adolescentes Infractores como Guías Caninos

Para Yuri Narváez, oficial entrenador del Centro Regional de Adiestramiento Canino (C.A.C.) de la Policía, este proyecto, apoyado por el Centro de Orientación Juvenil Virgilio Guerrero, busca la reorientación social de jóvenes en conflicto y mejora su autoestima con base en el trabajo, esfuerzo, disciplina y la educación en valores.
El programa Dejando Huella solamente es el inicio de una orientación dentro del concepto de buenas prácticas que ha implementado la institución policial en varias provincias del país. Esta básicamente dirigido a los adolescentes en crisis que vienen de hogares con una gran carga de violencia intrafamiliar, drogas y malos ejemplos de sus padres debido al consumo de alcohol y drogas.
Para los oficiales y policías a cargo de este programa fue una gran responsabilidad, pues tuvieron que ganarse la confianza de los jóvenes y adolescentes, quienes mantenían una posición de recelo y de timidez, para avanzar en el programa delineado.
Motivar y capacitar
Los instructores policiales perfilaron actividades para que los muchachos se inicien en el mundo de la instrucción básica de canes que duró alrededor de tres meses, tiempo en el cual los muchachos les tomaron cariño a sus canes asignados, los cuidaron, bañaron, alimentaron, educaron y compartieron en forma permanente, para después pasar a la siguiente etapa de instrucción y que los perritos obedezcan las señales que les daba su guía asignado.
Los chicos respondieron positivamente en este Primer Curso de Capacitación en Adiestramiento Básico de Canes, se integraron en una aventura nueva y desconocida para ellos pero con el esfuerzo y la constancia que pusieron, los resultados están a la vista puesto que pese a su inexperiencia en lo que concierne a manejo de mascotas, tuvieron la sensibilidad suficiente para ganarse el cariño y la obediencia de los perros que estaban bajo su custodia.
Programa intergubernamental
A futuro, señaló el oficial Nárvaez, “se les abre la posibilidad de realizar actividades de entrenamiento canino y de instrucción con una mayor capacitación, factor que les permitirá cambiar sustancialmente sus condiciones de vida y su visión de lo que necesitan y de lo que pueden hacer, sostuvo el entrenador. “Hemos visto a jóvenes adolescentes con mucha condición, afinidad y predisposición para tratar y entender a las mascotas”.
Los nuevos jóvenes guías caninos se encontraron muy ilusionados con esta nueva actividad y varios de ellos se encuentran leyendo libros sobre el tema, se preocupan de la alimentación de sus nuevos compañeros y tienen una responsabilidad y un compromiso que la van a cumplir a cabalidad.
Este proyecto fue apoyado por el Ministerio del Interior, el Ministerio de Justicia, la Fundación de Protección Animal Ecuador-PAE, entidad que facilitó los perros en adopción y los escogió para este tipo de programa; participó obviamente la Policía Nacional, el Centro de Orientación Juvenil Virgilio Guerrero y empresas auspiciantes vinculadas con la alimentación de canes y mascotas, que dan soporte al programa intergubernamental implementado.
La clausura del curso se efectuó con una demostración de lo aprendido por parte de los integrantes del Centro de Orientación Juvenil, dirigidos por los instructores de la policía y que tuvo el aplauso del público asistente que reconoció el esfuerzo realizado por todos quienes participaron en ese proceso.