Saltar al contenido principal

Rectificación para Diario El Comercio

Señora Guadalupe Mantilla de Acquaviva Directora General Diario El Comercio Imposible no dejar de preguntarnos de qué lado está la prensa mercantilista de este país. Imposible no dejar de respondernos que su lugar esta de lado de aquellos quienes tuvieron durante décadas sumergido al Ecuador en el atraso y el abandono, mientras ellos acumulaban cuantiosas fortunas.

Las ecuatorianas y ecuatorianos amanecimos este sábado nuevamente encarados al odio interesado y la mentira que la prensa mercantilista acostumbra publicar en única consideración de sus mezquinos afanes de lucro.

Me refiero a la nota publicada en la sección Seguridad, de las versiones impresa y digital de diario El Comercio, titulada “Encabezó una nutrida comitiva oficial que regresó sin resultados”. El artículo en cuestión hace una larga serie de aseveraciones falsas, manipuladas y especulativas respecto a las razones y efectos del viaje que una delegación hiciera a Panamá en días pasados.

Al respecto, me permito puntualizar que el motivo del traslado de los funcionarios fue exclusivamente para informar al Gobierno panameño respecto al nivel de peligrosidad y amenaza social que representa Galo Lara Yépez, y sobre quien a inicios de mes, se dio una sentencia condenatoria por parte de la Corte Nacional de Justicia, poniendo fin a meses de impunidad en el doloroso triple crimen ocurrido en Quinsaloma, provincia de Los Ríos.

Lo que a diario El Comercio no le interesa decir es que el Gobierno Nacional cumplió con su objetivo, que no fue otro que el informar al Gobierno de Panamá sobre la peligrosidad que resulta para la sociedad de ese país el albergar a un individuo con un largo expediente delictivo. Dicho cometido se cumplió, en la medida que en manos del gobierno panameño se entregó toda la documentación respectiva, como parte del trámite que debe ser analizado por el país hermano para procurar que Lara Yépez retorne al país a enfrentar la justicia por todo el daño que ha provocado a familias inocentes.

La advertencia puesta en conocimiento del Gobierno de Panamá se argumentó en la decena de crímenes a los cuales está vinculado Lara Yépez desde hace más de dos décadas. Muchos de ellos, relacionados con la pérdida de vidas inocentes, que no pudieron hacer nada ante el mafioso poder de quienes, falsamente, se convencieron a sí mismos de estar por encima de la ley.

En la nota se repite que “la nutrida delegación a Panamá, ha favorecido al ex asambleísta”. Con esta afirmación ustedes intentan una clara manipulación de la verdad, citando la calidad de ex asambleísta de Galo Lara. Es de público conocimiento que Lara Yépez fue procesado, juzgado y sentenciado por su innegable complicidad en la violación y muerte de tres personas inocentes, una de ellas, apenas un niño de cuatro años de edad.

Los tribunales a cargo de su procesamiento dejaron muy en claro que las actividades criminales de Lara Yépez jamás podían ser incluidas entre las facultades atribuibles a la labor legislativa. Menos aún podían reconocer su inmunidad parlamentaria, como pretendió su defensa procesal. Acaso, ¿es propio de un legislador el realizar llamadas telefónicas para contactar criminales? ¿Es connatural al entorno legislativo el proveer de dinero para el pago de esas mismas acciones criminales? Lo que ustedes pretenden con esa insinuación, es crear un falso concepto de perseguido político, a suerte de burdo escudo, que antes ya le sirvió a Lara Yépez para eludir a la justicia cuando fuera involucrado en otros crímenes ocurridos en Los Ríos y otras partes del país.

La intención exhibida por diario El Comercio refleja, en forma reiterada, su indolente posición frente a las víctimas de Quinsaloma. Cuántas líneas ha dedicado este vivo ejemplo de la prensa mercantilista a referir el sufrimiento de las familias Avendaño y Parco. Cuántas veces hemos visto en las páginas de diario El Comercio esa misma vehemencia que demuestran para presentar a Lara como perseguido, para visibilizar el dolor de las familias víctimas de las ilícitas pasiones de Lara Yépez, Cuántas veces hemos visto alguna intención en diario El Comercio para reclamar algo de justicia para ese niño de cuatro años de edad que murió en medio de un arrebato pasional aupado por Lara Yépez y su oscuro entorno afectivo, según quedó claro en la sentencia emitida por el caso Quinsaloma. Ninguna. Su esfuerzo se desplegó única y exclusivamente a defender a un sentenciado por la justicia ecuatoriana, bajo un inexistente supuesto de “perseguido político”.

Diario El Comercio omite, deliberadamente, los hechos ocurridos en 1990 y 1991, que reflejan claramente lo que representa Lara Yépez. Referimos a la violación y muerte de una joven en Quevedo, en enero de 1990, y por lo cual, el Juzgado Séptimo de lo Penal de Los Ríos abrió un proceso judicial en contra de Lara y otra persona. La respuesta de Lara Yépez fue huir hacia los Estados Unidos, a la espera de que prescribiera el proceso, como en efecto ocurrió en el año 2004. Otro hecho del cual diario EL Comercio, deliberadamente, evita referir, en su burda campaña por defender lo indefendible, tuvo lugar en Estados Unidos. En mayo de 1991, en el estado de Florida, el Buró Federal de Investigaciones (FBI) reporta el arresto de un individuo identificado como Galo Tito Lara, por el delito de robo domiciliar. Policía ecuatoriana verificó que la identidad de ese sujeto es la misma de quien en Ecuador se identifica como Galo Tito Lara Yépez.

Ambos hechos exhiben a plenitud la naturaleza criminal de Lara Yépez. Nada de esto ha sido de interés para diario El Comercio. Al contrario, han continuado con su insensata política editorial de insistir en una falsa e inexistente persecución política. Bajo este irracional supuesto, detrás de esa misma persecución estarían los gobiernos del ecuatoriano Rodrigo Borja y del estadounidense Barack Obama, puesto que en sus respectivos períodos y países ocurrieron los hechos de sangre y delictivos en los que participara Lara Yépez.

Diario El Comercio esconde en su política editorial una inmoral intención de negar lo evidente. Me refiero al pasado criminal que arrastra Lara Yépez. Díganle ustedes al país porqué intentan esconder ese oscura trayectoria repleta de abusos y dolor provocado. Por qué ocultar que Lara Yépez mantiene un prontuario criminal por robo a domicilios en Estados Unidos. Por qué ocultar su relación con la muerte y violación de una joven que en 1990 intentó resistirse a las mismas pasiones criminales tan comunes en el pasado de Lara Yépez, y de cuya responsabilidad se evadió cobardemente solo huyendo del país, tal cual ha hecho ahora para esconderse en la hermana república de Panamá. Por qué ocultar las otras causas por estafas, desatención familiar y todo un escenario personal mezquino y criminal que exhibe la verdadera naturaleza de Lara Yépez.

En el mencionado artículo, diario El Comercio, falsa e irresponsablemente, asevera también que son 14 los funcionarios que acompañaron a la delegación. Por la “investigación” que ha realizado el autor de esta nota tendenciosa, el Ministerio del Interior conmina a diario El Comercio a probar o rectificar si efectivamente fueron 14 los funcionarios de gobierno los que viajaron hasta Panamá.

Una vez más queda comprobado, que diario El Comercio y otros medios mercantilistas que han calificado de ‘patética’ la labor del gobierno nacional en este caso está de lado de los violentos, de la impunidad, de la inseguridad. Ventajosamente ya nadie les cree.
Con lo expuesto son destacables las diferencias entre lo manifestado por diario El Comercio y la verdad que nos asiste. En este sentido, en virtud de los prescrito en el artículo 66, número 7) de la Constitución de la República, le solicito la correspondiente rectificación, inmediata, obligatoria y gratuita de la información inexacta y descontextualizada, publicada en el rotativo que usted representa en el articulo denominado “Encabezó una nutrida comitiva oficial que regresó sin resultados”, con fecha de este sábado 21 de septiembre de 2013, en la sección Seguridad, de sus versiones impresa y digital.

 

Ministerio del Interior


 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *