Guayaquil.- Con el propósito de fortalecer los conocimientos que los policías tienen en relación a los puntos turísticos que existen en la zona 8, correspondiente a Guayaquil, Durán y Samborondón e instruirlos en relación al buen trato que deben ofrecer a los visitantes nacionales y extranjeros, 200 servidores policiales fueron capacitados durante una semana, obteniendo resultados positivos al culminar el curso.  

El cabo Anibal Bustamante fue uno de los participantes, considera que lo aprendido le servirá principalmente cuando se encuentra prestando servicio en el centro de Guayaquil, “cuando camino por una plaza cívica o cerca de una iglesia, al verme en uniforme, usualmente los turistas se acercan a preguntarme información sobre dichas arquitecturas o ubicación y horarios de museos, ahora me siento más seguro en poder dar la información precisa”, explicó.

Por su parte, el sargento segundo Fernando Quinaluisa, capacitador, dijo sentirse muy complacido por la apertura del grupo en querer educarse y servir a los ciudadanos. “A diferencia de Quito donde existe una unidad de Policía Turística, en Guayas no existe, esperamos hacerlo próximamente. Mientras tanto es elemental que todos los gendarmes tengan claro que de su cordialidad y asistencia depende la imagen, no sólo de la institución sino del país”, indicó.

Otro asistente al curso fue el cabo segundo Edgar Ponce, quien pertenece a la unidad de comunicación estratégica, mostró su satisfacción por lo aprendido durante las 20 horas de capacitación puesto que ello le será de utilidad en su labor diaria. “Como departamento nos encargamos de organizar los eventos de la institución y a muchos de ellos vienen invitados de otras ciudades y países. La próxima vez que tenga contacto con ellos y me consulten detalles de la provincia, opciones para comer u hospedarse podré ayudarlos de mejor manera”, agregó.

El profesor Quinaluisa subrayó que como parte de su formación académica, los uniformados saben sobre medidas de seguridad, sin embargo, durante esta semana se les dilucidó la forma en que esta información debe llegar a los turistas nacionales y extranjeros. “Siempre es bueno decirles que tomen precauciones pero no se trata de asustarlos, se realizó prácticas entre ellos y se logró el objetivo”, añadió.

Dentro de la formación teórica se explicó que el turista es importante para la institución. El visitante no depende de los policías, sino viceversa, no interrumpe su trabajo sino que él es parte de la razón de su trabajo. Los turistas no son un número estadístico, son personas con sentimientos y emociones, que traen sus necesidades y la labor como uniformado es satisfacerlas. Por ninguna circunstancia se debe discutir con el turista.

Amabilidad y eficiencia

La clave en del buen servicio se basa en la amabilidad y la eficiencia les indicó el instructor a los asistentes. “Sonreír, saludar a todos los turistas sin importar su condición, mirarles a los ojos cuando nos habla, mostrando interés en sus asuntos, atenderlo con rapidez, responder a las preguntas con claridad, en caso de no ser la persona indicada para solucionarle un inconveniente, guiarlo con la persona o entidad llamada a hacerlo”, recordó el instructor al culminar el curso. /Redacción Guayas.

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