Quito.- Un total de 800 miembros de la Policía Nacional y Fuerzas Armadas custodian las canteras en San Antonio de Pichincha, a partir de la Resolución emitida el martes 12 de agosto por la Secretaría de Gestión de Riesgos, mediante la cual suspendió toda actividad minera en esta zona que fue severamente afectada por el sismo registrado ese día.

Así lo confirmó el viceministro de Seguridad Interna del Ministerio del Interior, Javier Córdova, quien en entrevista en Radio Pública del Ecuador, señaló que al momento la emergencia está controlada y se espera hasta el próximo jueves, dos informes técnicos del Ministerio de Transporte y Obras públicas, respecto a la habilitación de la vía desde el intercambiador de Collas hasta Guayllabamba; y, sobre la operatividad de las canteras.

“Estamos precautelando la seguridad de las personas con un trabajo coordinado con el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal que lo preside el alcalde Mauricio Rodas, con respuestas oportunas e inmediatas a los requerimientos de la ciudadanía”, anotó el viceministro Córdova.

Ratificó que las operaciones mineras están suspendidas dado el alto riesgo de la zona. Esta medida, apuntó, no discriminó a operadores legales e ilegales, únicamente se precauteló la seguridad de quienes trabajan en el lugar.

Los delitos disminuyen

En el ámbito de seguridad, el viceministro de Seguridad Interna, Javier Córdova se refirió a la disminución importante en todos los delitos que monitorea el Cuadro de Mando Integral, especialmente en homicidios y asesinatos, que en lo que va del año su tasa de casos por cada 100 mil habitantes se ubica ya en un dígito.

Mostró su optimismo al afirmar que la meta propuesta hasta el año 2017, la tasa de homicidios y asesinatos se ubicará en 5 casos por cada 100 mil habitantes.

“Los niveles de violencia han disminuido de manera importante”, dijo al remarcar que se seguirá jugando el todo por el todo, porque el objetivo no es llegar, sino mantener una misma tendencia y procurar que la ciudadanía recupere la paz que anhela y se genere un ambiente de convivencia pacífica.

El funcionario aseguró que las cifras motivan a llegar al 2017 a ubicarnos entre los países con la menor tasa, no solo de homicidios y asesinatos sino de los demás delitos en Latinoamérica.

“Haremos una fiesta cuando la tasa sea de cero, mientras esto no se dé, seguiremos trabajando intensamente”, concluyó Córdova Unda.