Quevedo.- La sustracción de dos revólveres por parte de tres individuos se produjo, este miércoles, en una hacienda ubicada en el sector El Pital de esta ciudad.

Se trata de dos armas tipo revólver de fabricación artesanal de series J-5115 y J-5349, las mismas que eran de la dotación entregada al personal que labora en la garita de ingreso, brindando seguridad a la hacienda El Guayabo S.A.

La novedad del robo de las dos armas fue reportada por la central de radio de la Policía Nacional, hasta donde acudieron policías de la UPC-El Pital, en primera instancia, y luego agentes de la Policía Judicial de Quevedo para indagar el hecho.

Según diálogos con Jaime S.C., guardia de seguridad quien vestía un uniforme de la compañía privada ExpreSeguridad, el robo se produjo el miércoles aproximadamente a las 06h00, cuando tres hombres llegaron en una moto tipo paseo color azul hasta la garita en la que vigilaba y lo amenazaron con una arma, entonces fueron directo a buscar los elementos de su dotación e inmediatamente huyeron.

Un compañero de guardia, que prefirió guardar su identidad, señaló que los tipos que se sustrajeron las armas llegaron por la vía que llega a a zona desde La Esperanza y Cañalito.

El testigo dijo además no conocer de quiénes se trata y tampoco tienen indicios de para qué se llevaron las armas de dotación de sus compañeros.

El supervisor de la compañía ExpreSeguridad, militar retirado, se acercó a la UPC-El Pital, confirmó la serie de las armas robadas e indicó que asentaría la respectiva denuncia en la Fiscalía para dar con el paradero de los que se llevaron la dotación.

Ubicación de hacienda

La garita de ingreso a la hacienda Guayabo, cuyo principal producto de cultivo es el banano para exportación, se encuentra a cinco minutos del sector El Pital, a la cual se llega por un camino lastrado, con muchos baches, lo que dificulta el acceso en vehículo.

También se accede hasta la hacienda por el lado de la parroquia La Esperanza y la comunidad de Cañalito, cuya vía se encuentra completamente asfaltada, pero hace mayores las distancias.

El supervisor de la compañía comentó que la hacienda está llena de guardarrayas, por las cuales es muy fácil perderse y salir a otros sitios poblados, pero confía en el trabajo de la policía y tiene la fe que darán con los que se robaron las armas. /Redacción Los Ríos.

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