Cuenca.- Mantener un apropiado estado físico, para responder a las exigencias del trabajo policial, es una de las prioridades de la Policía Nacional, por ello las pruebas y evaluaciones son constantes y cada vez más exigentes con el propósito de que los uniformados estén preparados en esta área.

Las pruebas físicas contemplan dos áreas, atletismo y natación, ya que son consideradas como las disciplinas más completas y sobre todo en cualquier momento las deben implementar los uniformados durante su actividad normal.

El coronel Pablo Ramírez, jefe de Operaciones en el Azuay, indicó que una de las prioridades de la Policía Nacional en este año es garantizar el buen estado físico de todos sus elementos.

“La profesionalización policial va más allá de mejorar los conocimientos teórico-prácticos de los miembros de la institución, ya que buscamos que nuestros elementos estén plenamente preparados en su salud, por ello se efectúan las pruebas físicas que van de la mano de exámenes médicos periódicos”, indicó Ramírez.

Controles

En esta ocasión, las pruebas físicas fueron coordinadas con los estudiantes de Cultura Física de la Universidad de Cuenca, quienes controlaron los exámenes que se cumplieron en la pista atlética Jefferson Pérez en Miraflores, así como en la piscina de la institución de educación superior.

“En pista, los uniformados efectúan pruebas de velocidad y resistencia, así como ejercicios coordinados. Mientras que en la piscinas ejecutan varios ejercicios con el objetivo de observar sus destrezas”, indicó una de las instructoras.

Los policías deben obtener una calificación superior a los 15 puntos sobre 20 para aprobar el examen, de no alcanzar este puntaje tienen una nueva opción, luego de un par de semanas. /Redacción Azuay.

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