700 uniformados mantuvieron el orden en cotejo de Liga de Quito contra Barcelona
Quito. 700 uniformados de diferentes servicios policiales custodiaron a hinchas y aficionados que acudieron desde tempranas horas de la tarde del miércoles 29 de abril a la Casa Blanca, para disfrutar del partido futbolístico entre las escuadras de Liga Deportiva Universitaria de Quito y Barcelona Sporting Club, un partido diferido de la octava fecha del Campeonato Nacional de Fútbol.
El coronel Pablo Tamayo, jefe del operativo de seguridad, señaló que el accionar policial inició a partir de las 14h00 y el dispositivo de seguridad desde las 16h00, con la participación de la Policía Judicial, Dirección Nacional de la Policía Especializada para Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen), Centro Regional de Adiestramiento Canino (Crac), Unidad de Mantenimiento del Orden Público (UMO), Unidad de Equitación y Remonta (UER), Grupo de Operaciones Especiales (GOE) y Grupo de Operaciones Motorizadas (GOM).
Tamayo comentó que los hinchas de Barcelona ingresaron con normalidad a la platea alta de la General Sur, mientras que los de LDU (Q) a la platea baja, en medio de estrictas medidas de seguridad, así como la debida verificación de los pases de ingreso a las respectivas localidades.
La autoridad policial sostuvo que las barras que animan a cada equipo en su acceso al estadio de Ponciano, dieron muestras de un buen comportamiento, no se registraron agresiones mutuas, por lo que se mostró satisfecho porque no hubo ninguna alteración que empañe la fiesta del deporte de multitudes.
Del mismo modo puntualizó que el operativo de seguridad se desplegó al exterior e interior del estadio. En las afueras se ubicaron en la estación de la metrovía, para evitar que las personas sean presa de la delincuencia o se altere el orden público.
Al interior del escenario deportivo se asignó 350 policías que fueron distribuidos en la cancha y graderíos de las diferentes localidades. “El operativo se cerrará cuando el aficionado abandone el campo deportivo”, anotó el coronel Tamayo.
Operativos de control
Por su parte, Edwin Castelo, intendente General de Policía de Pichincha, neutralizó el negocio ilícito de personas que ofrecían las entradas al doble y triple del precio marcado en el boleto a las localidades de generales que normalmente es de 10 dólares
“En esta tarea se incautó más de 50 pases, los mismos que fueron vendidos de manera directa a los concurrentes a 15 dólares, considerando un margen de ganancia del 10% del valor marcado”, precisó Edwin Castelo, al indicar que se ha evitado un perjuicio económico a las personas y además, se ha dado cumplimiento a lo que establece la Ley Orgánica de Defensa del Consumidor.
Agradeció el apoyo ciudadano al denunciar a estas personas que revendían las entradas con sobreprecios, al tiempo que conminó a poner al descubierto estos hechos a las autoridades competentes.
Asimismo, realizó un exhaustivo control a los establecimientos comerciales ubicados a 200 metros a la redonda del estadio, con el fin de exhortar a los propietarios sobre la prohibición de expender licor.
Con cánticos, consignas y vivas de parte de los aficionados, a las 19h30 inició el partido entre albos y toreros. /Redacción Quito.
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