Quito. Con una amplia acogida se desarrolló el evento comunitario ‘Caminando Juntos’, este domingo 3 de abril del 2016, con la participación de 115 personas entre miembros policiales, voluntarios comunitarios y personas con discapacidad visual, quienes llegaron hasta el volcán Antisana.

El evento que fue organizado por el Distrito de Policía La Delicia, en coordinación con la Federación Ecuatoriana de Deportes para Personas con Discapacidad Visual (Fedevif), tuvo como objetivo incrementar y afianzar los lazos entre la comunidad en situación de vulnerabilidad y la Policía Nacional, a través de una actividad deportiva.

A las 07h00 inició la concentración en las instalaciones del complejo habitacional de la Policía Nacional, donde 33 miembros policiales, entre oficiales, clases y policías, del Distrito La Delicia, Policía Comunitaria, Grupo de Intervención y Rescate (GIR), y paramédicos, se desplegaron para resguardar la seguridad de las personas que asistieron a la caminata.

A las 11h00 dio inicio la caminata hasta los glaciares del volcán Antisana, donde miembros del GIR impartían normas de seguridad y disposiciones para los participantes, mientras el personal policial se encargaba de custodiar y acompañar a cada grupo conformado por personas discapacitadas visuales y voluntarios comunitarios, que efectuaron la labor de guías en la travesía de ascenso.

Diana Vallejo, voluntaria comunitaria del sector de Ponciano, manifestó que esta experiencia le permitió descubrir cómo las personas no videntes pueden disfrutar plenamente de su vida sin impedimento, pues ellos han aprendido a valerse solos y eso les posibilita integrarse a las actividades cotidianas de la sociedad.

A fin de no descuidar detalles y garantizar la seguridad se contó con tres buses, una ambulancia, un patrullero, y un móvil de rescate, que custodiaron a los participantes durante la travesía.

La caminata duró alrededor de tres horas y media en el trayecto de ida y vuelta, bajo la guía especializada del subteniente Carlos Cevallos, del GIR, acompañado de tres comandos especializados y 19 miembros policiales, que custodiaron a 20 personas con discapacidad visual que recorrieron 6 kilómetros, alcanzado una altura 4.100 metros.

Las condiciones climáticas del terreno, lluvia y frío, no permitieron culminar con la meta planteada porque existía riesgo para los participantes. Alrededor de las 14h00 se realizó un receso, donde todos los participantes compartieron un refrigerio, Además, se realizó una dinámica de compartir las experiencias vividas, se entregó medallas, diplomas como guardianes del agua, y certificados de participación por parte de la institución policial.

Para José Benavidez, (abogado de profesión), no vidente y miembro de la Federación Ecuatoriana de Deportes para Personas con Discapacidad Visual, la experiencia de compartir con miembros policiales y voluntarios fue enriquecedora, por cuanto se comparten experiencias de vida que permiten obtener buenas amistades. “La discapacidad no es impedimento, todas las personas somos capaces de lograr lo que nos propongamos en la vida, hay que ser positivos, tener sueños, metas y caminar hacia ellas”.

En el camino de retorno, las risas, la armonía y la amistad primaron en el grupo, haciendo corto el descenso, mientras que miembros policiales y participantes aprovecharon los hermosos paisajes que ofrecía el lugar para tomarse fotografías.

La subteniente Estefany Vallejo, jefe del departamento de la Policía Comunitaria del Distrito La Delicia, agradeció a todas las personas que hicieron posible el evento, e indicó que este es este el primer paso “para convertirnos en una Policía comprometida con las personas más vulnerables. Queremos integrarnos con las personas que tengan cualquier tipo de discapacidad, pues nuestra labor es atenderlos y brindarles seguridad y cariño, pues somos policías y esa es nuestra misión”.

En el viaje de retorno, los participantes agradecieron la organización del evento por parte de la Policía Nacional, y manifestaron que “gracias a esta experiencia hoy se sienten un miembro más de la sociedad y un policía en su corazón”. Redacción Quito.