Un contingente de 438 policías colabora con la comunidad en temporada invernal

Loja.- La Policía Nacional reafirma su compromiso para con su comunidad. 438 oficiales clases y policías, 120 vehículos y 68 motos contribuyen a mitigar los efectos del crudo invierno que soporta el país.
Sin importar condiciones geográficas y climatológicas, los servidores policiales protegen a las familias que están en peligro y visualizan cualquier situación que atente contra la seguridad de la ciudadanía.
Un total de 87 oficiales, 351 clases y policías, con el apoyo logístico (vehículos y motocicletas), laboran en las nueve zonas del país. El mayor porcentaje de uniformados y logística presta su contingente en las provincias de El Oro, Loja, Zamora Chinchipe, Bolívar, Guayas, Santa Elena, Los Ríos, Santo Domingo de los Tsáchilas y Manabí.
Según reporte de la Unidad de Gestión de Riesgos del Ministerio del Interior, del 1 de enero al 1 de abril del presente año, fueron afectadas 14 495 personas 3.739 viviendas; 104 escuelas. Además, fueron albergadas 700 personas, 99 viviendas fueron destruidas y se registraron 19 fallecidos.
Han sido declaradas en alerta naranja 19 provincias: Carchi; Imbabura, Pichincha, Bolívar, Cotopaxi, Chimborazo, Azuay, Cañar; Loja, Santo Domingo de los Tsáchilas, Esmeraldas, Manabí; Guayas, Santa Elena, Los Ríos, El Oro, Galápagos; Zamora Chinchipe y Tungurahua. Los Comités de Operaciones Emergentes (COE), se activaron en estas jurisdicciones, a fin de enfrentar las contingencias, resolver y promover la atención prioritaria a las personas afectadas.
Las afectaciones más notables se dieron en las provincias de Guayas, Esmeraldas, Los Ríos y Manabí, donde existen 12 237 personas aquejadas por la temporada invernal.
Según la Secretaría General de Riesgos y el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), han sido albergadas 181 familias y 774 personas. Existen 28 albergues activos y 215 personas y familias que han sido acogidas a escala nacional.
La Policía ha tenido presencia en eventos adversos como inundaciones, deslizamientos, deslaves, desbordamiento de ríos, desapariciones, entre otros. Los uniformados colaboran en las evacuaciones y traslado de las pertenencias de los afectados por las lluvias hasta sitios seguros y que permanecen vigilantes ante cualquier eventualidad, ya que según los informes pluviales las lluvias se prolongarán en el país por varias semanas más. Redacción R. P. /Quito.