Panantza.- Tras la declaratoria expedida por el Presidente de la República, el 12 de enero, de extender el estado de excepción por 30 días más, por el ataque armado de grupos de indígenas amazónicos en el campamento minero San Carlos Panantza, provincia de Morona Santiago, el resguardo policial se fortalece en la comunidad, sin afectar las actividades normales de la localidad.

Desde el 14 de diciembre de 2016, día del suceso, un contingente policial de 315 efectivos de la Unidad de Mantenimiento del Orden (UMO), Grupo de Operaciones Especiales (GOE), Grupo de Intervención y Rescate (GIR), Grupo Especial Movil Antinarcóticos (GEMA), y del eje preventivo, patrullan las calles, viviendas, locales comerciales, planteles educativos, parques y plazas, para brindar mayor seguridad a la ciudadanía y sus moradores.

Al momento, este numérico de agentes del orden vigila el normal desenvolvimiento de las actividades en esta zona, para que no se genere ningún acto de violencia y mucho menos sobre la base de una supuesta protesta social. En este sentido, todos lo ciudadanos tienen el derecho de manifestar las diversas posiciones, pero siempre en el marco de lo que establece la Constitución y sobre todo respetando los derechos y la integridad de los conciudadanos.

En contexto

Un policía fallecido y 27 heridos, entre ellos dos militares y un civil, fue el resultado del ataque inesperado por parte de un grupo armado ilegal al campamento minero La Esperanza, en Morona Santiago, cerca de las 17h00 del miércoles 14 de diciembre.

Una de las acciones del Gobierno Nacional para lograr la detención de los responsables de los ilícitos registrados en esta provincia fue la activación del Plan de Recompensa de hasta 50 mil dólares. Esto, a quien brinde información real y verificada de la ubicación de los autores de la muerte de un policía y la agresión contra uniformados. La información se manejará en absoluta reserva.

Además, autoridades de esta Cartera de Estado y del Alto Mando policial visitaron continuamente la zona para recibir información de la comunidad y generar un trabajo interinstitucional para la seguridad y con el fin de detener a los responsables.

En la zona desarrollaron operativos policiales y militares, con el fin de restablecer el orden público en comunidades en las que grupos armados ilegales crearon caos. En muchos lugares saquearon y robaron, perjudicando a los ciudadanos que desean vivir en paz.

Desplegado el operativo de seguridad y restablecido el control y orden público, continuará una segunda fase de sostenimiento que permita garantizar la seguridad de los ciudadanos y compatriotas shuar. Redacción A. R. /Quito.