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‘Camina Derecho’ busca romper estigmas y crear conciencia sobre el uso de drogas en los jóvenes

Quito. Los miembros policiales del distrito Calderón, al norte de Quito, desde mediados de febrero apostaron por un proyecto social diferente: la música como medio preventivo en el consumo de drogas y la no violencia. Entre los productos a lanzar se destaca un CD musical de género urbano y la creación de un estudio musical comunitario para impulsar a los artistas locales.

Al compás de melodías del género urbano como el hip hop y reggaetón, con letras que exhortan a un buen comportamiento, dejar o evitar el consumo de drogas y alcohol, alejarse de malas compañías, entre otros, son parte de las piezas musicales que la Policía Nacional del distrito Calderón lanzará, en conjunto con artistas nacionales de estos ritmos musicales, el Teniente Político y miembros de organizaciones juveniles.

Esta iniciativa espera llegar a más de 20 mil adolescentes de Calderón, en un total de 22 colegios en los que, durante los minutos de recreación en la jornada de clases, sonarán las canciones compuestas por este singular equipo. Camina Derecho y Vivir sin Miedo son los primeros hits de muchos que pretende lanzar este proyecto en un CD, con una fecha tentativa del 15 de mayo del presente año.

Apoyo en una iniciativa diferente

Carlos Pozo, comandante del distrito, lleva cinco meses al mando de este sector. Él comentó que han tenido gran apoyo de las autoridades y de los artistas, quienes han colaborado de manera voluntaria en esta iniciativa diferente, que busca la capacitación de los adolescentes.

Marcelo Montenegro, jefe del circuito Calderón, es quien ideó el proyecto. Él indicó que la apertura de los artistas en esta lucha contra el consumo de sustancias ilícitas ha sido buena. Para escogerlos, hicieron consultas a los estudiantes de los colegios para determinar quiénes son sus ídolos musicales y con ellos componer estas piezas.

Cantantes como Oveja Negra, Maeza, Doble Impacto, Gabo el Mágico, Estrambóticos, Ruddy Rodríguez como madrina internacional del proyecto, entre otros forman parte del proyecto. Un total de 15 artistas comprometidos con la lucha contra la drogas en los jóvenes, ya se han reunido para plantear futuros temas y también la grabación de los videos.

Los hits musicales no solo son compuestos por músicos profesionales con amplia trayectoria, sino también por policías. Montenegro señaló que a esta integración la conforman artistas y Policía, dos gendarmes y cantantes de género urbano. Todos corean juntos las letras de las canciones.

Video:

La música como rehabilitación

En un pequeño estudio de grabación color azul, en las instalaciones de Radio Vigía, un grupo de integrantes de los Latin Kings seguía las directrices de Paolo Moreno, productor musical a cargo del tema Vivir sin Miedo, que sonaba en el fondo.

Moreno expresó que para el tema decidieron optar por el ritmo “hipa”, ya que los Latin son calle y se identifican con ese estilo. Para Moreno, componer la melodía fue sencillo, tardó tres horas. Una vez con la pista lista, la letra entonada a capela por los cuatro integrantes fluye.

Manuel Zúñiga, cantante e integrante Latin, agradeció a las instituciones como el Ministerio del Interior y la Policía Nacional por preocuparse en que el mensaje positivo llegue a la sociedad a través de la música.

Zúñiga comentó que las canciones son mensajes de jóvenes para jóvenes que buscan combatir la discriminación e impulsar la inclusión de miembros de las organizaciones a la sociedad. Su talento se demuestra en la rapidez con que logran componer la letra y darle el “flow” para captar a las masas. Agregó que al ponerles la pista y darle ideas principales, automáticamente la letra toma armonía.

A partir del 2001, Zúñiga empezó a crear música e incentivar a sus hermanos Latin a dedicarse a ello. Desde ahí luchan contra la discriminación por ser parte de una organización juvenil, trabajo que no ha sido fácil y que aún continúa gracias al acercamiento con las autoridades de seguridad que buscan romper este estigma de “pandilla”. /Redacción Quito.

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