Con honores, Policía Nacional despidió a nuevo héroe fallecido en cumplimiento de su deber

Rodrigo Amable Alquinga Concha recibió los santos óleos en la misa de Réquiem, que la Policía Nacional celebró por haber entregado su vida al defender a un ciudadano el día miércoles 26, cuando intentaban robar dos delincuentes.
El sacerdote de mayor jerarquía quien dirigió el culto, acompañado de 7 clérigos más, dijo durante el oficio religioso que la acción del comando del GIR, a cargo de la seguridad ciudadana y de funcionarios, fue un sacrificio sin mancha. Su vida no terminó, sino que se transformó en un ángel guardián, que cumplió con su deber.
Lucharemos por erradicar la delincuencia
El comandante General de Policía, general Rodrigo Suárez, con voz entrecortada y dolida, dijo que “44.700 policías hemos realizado un juramento solemne de ofrendar nuestra vida, si así lo exige la sociedad. Las manos asesinas de Rodrigo Amable Alquinga nos han dejado un profundo dolor, pero esto no nos va a desanimar. Vamos a continuar nuestro trabajo, no solo por entregar a los criminales a la justicia, sino hasta desterrar de nuestro país la estela de la delincuencia”.
El Ministerio del Interior y la Comandancia General de Policía, vía decreto ministerial e institucional, decidieron otorgar el ascenso post-mortem a Rodrigo Amable Alquinga Concha, de sargento primero a suboficial segundo. Además le otorgaron la condecoración “Al Valor”, por su excepcional acto de valentía, al haber caído en acción y en cumplimiento de su deber.
El Presidente de la República fue el encargado de imponer la condecoración al agente caído, en manos de su esposa, Irene del Pilar Tibán.
Oración de batalla
Sus colegas rezaron la oración del Policía y que la practican cuando salen a operativos, dentro de un marco de solemnidad, trompetas y dolor. A muchos de los colegas asistentes, les corrían lágrimas por sus mejillas, mientras la invocaban.
En la celebración quemaron, una manera simbólica de purificar y despertar la consciencia por los hechos sucedidos, meditando y atrayendo la paz, equilibrio y consuelo para superar los momentos de dolor, por los que atraviesa la familia del fallecido y el Cuerpo Policial.
Protección institucional
El Ministerio del Interior, conjuntamente con sus unidades de protección de derechos ciudadanos, ha dispuesto un total apoyo a la familia del suboficial Rodrigo Alquinga, para que no quede desprotegida en ningún aspecto. La Institución Policial cubrirá todos los gastos referentes al sepelio y brindará tranquilidad socioeconómica a la familia, por la ausencia física del policía fallecido.
Detenidos en Tungurahua
Este viernes 28 de marzo, en la madrugada, fueron aprehendidos dos presuntos implicados en la balacera registrada el 26 de marzo pasado, en el sector de la Pradera, sector norte de la capital. Los sospechosos fueron ubicados, gracias a un intenso operativo policial, con apoyo de personal de Antinarcóticos de Tungurahua. Esto informó en su cuenta de Twitter, el ministro del Interior, José Serrano.
Antecedente
El miércoles pasado se produjo una balacera en el norte de Quito, en el que fallecieron un policía y dos civiles. Los hechos se produjeron a la altura de la avenida Diego de Almagro y Pradera. Las víctimas, un policía, Rodrigo Alquinga, agente del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) quien frustró el asalto; un civil al que intentaron robar y un sospechoso armado, causante de las dos muertes. La Policía aseguró que se trató de un robo bajo la modalidad de sacapintas.