Cuerpo sin vida de adulta mayor fue localizado, en Chaucha

Cuenca.- Luego de más de ocho días de extenuante búsqueda por medio de terrenos escabrosos, ambiente húmedo y agreste geografía de la parroquia rural de Chaucha, este martes, en horas de la tarde, ubicaron el cuerpo sin vida de María Elena Criollo Fajardo, de 83 años, en medio del lamento de sus familiares, quienes apoyaron en las labores.
El rescate fue encabezado por comandos del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) y personal de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased) de la Subzona Azuay, con el apoyo de voluntarios del Cuerpo de Bomberos de la ciudad de Cuenca.
Luego de más de ocho días de extenuante búsqueda por medio de terrenos escabrosos, ambiente húmedo y agreste geografía de la parroquia rural de Chaucha, este martes, en horas de la tarde, ubicaron el cuerpo sin vida de María Elena Criollo Fajardo, de 83 años, en medio del lamento de sus familiares, quienes apoyaron en las labores.
El capitán José Vallejo, jefe del GOE en Azuay, señaló que los uniformados iniciaron su labor luego de que una acción de búsqueda llegó a la Central de Emergencia Ecu-911 y fue despachada hacia la unidad, el domingo 3 de julio, en horas de la mañana.
Según el parte policial, el cuerpo fue encontrado a 20 kilómetros de su vivienda, en medio de una zona montañosa, por lo que se presume que la mujer se habría extraviado y debido a las difíciles condiciones climáticas falleció.
Localización y búsqueda
Los rescatistas encontraron el cuerpo sin vida en la comunidad Taqui Culebra. Las diligencias del levantamiento del cadáver fueron cumplidas por agentes de la Dinased. En primera instancia, el cuerpo fue trasladado a la escuela San Miguel de Chaucha y luego al Centro Forense para la necropsia de Ley que permita determinar la causa de la muerte.
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Se presume que la ciudadana sobrevivió por varios días en la espesa montaña debido a que fue encontrada tapada con vegetación propia de la zona. “Teníamos la esperanza de encontrar con vida a la señora, pero lamentablemente no fue así. Las condiciones son durísimas en ese sector, al menos entregamos a sus allegados el cuerpo para que le den santa sepultura”, dijo Ibáñez. Redacción Azuay.
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