Quito.- Tras un mes y medio de investigación, el pasado 28 de noviembre, personal de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (DINASED); localizó en la provincia de Napo, el cadáver de un hombre reportado como desaparecido. Se presume que el ciudadano fue victimado por dos de sus hermanos. Ambos sospechosos fueron ya detenidos.

Raúl A. A. fue reportado como desaparecido el pasado 14 de octubre. El propietario de la finca donde trabajaba en calidad de jornalero realizó la denuncia. Según su versión, desconocía el paradero de su empleado desde los primeros días del mes, pues no habría regresado a laborar.

Producto de varias acciones investigativas reañizadas por DINASED, se sospechó que el presunto desaparecido habría sido asesinado. Los indicios hallados en el proceso condujeron a presumir responsabilidad sobre dos de los hermanos de la víctima. Fiscalía solicitó boletas de detención sobre los hombres, las que se hicieron efectivas. Ambos detenidos fueron ubicados en la parroquia Ahuano, comunidad Cashayacu, en sus respectivos domicilios.

Respecto al occiso, su cuerpo fue hallado enterrado a 1.500 metros de dichas viviendas, dentro de la propiedad de la familia. El cadáver yacía dentro de un ataúd artesanal de madera, envuelto en cobijas y presentaba un avanzado estado de descomposición.

Los motivos por los que se habría consumado el crimen, aún están en investigación, Se conoce que el fallecido durante su adolescencia se trasladó a Guayaquil y vivió durante mucho tiempo en el lugar. Hace poco habría regresado a su hogar y se habrían generado fricciones familiares.

En la audiencia de flagrancia, desarrollada el sábado por la tarde, la autoridad competente dictaminó prisión preventiva para los sospechosos. Los hombres fueron trasladados al Centro de Rehabilitación Social de Archidona. Respecto a los restos humanos hallados, en el Centro de Investigaciones Forenses de Tungurahua se esclarecerá la causa de muerte.

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