Shell.- Con apenas dos helicópteros, uno de ellos destinado para la cátedra, y 16 miembros entre pilotos y técnicos, el Servicio Aeropolicial (SAP) de Pastaza, ubicado en la comunidad de Shell, cubre el 41 % del territorio ecuatoriano, es decir, toda la Amazonía.

Sus pilotos están entrenados absolutamente para todo. En el helicóptero, religiosamente reposa un mapa de la Amazonía con datos geográficos y coordenadas, en caso de necesitarlo. Antes de emprender una misión analizan en el mapa la ruta a seguir, calculan las horas de vuelo y el combustible necesario.

Misiones en el aire

Entre sus misiones está rescatar a las comunidades afectadas por el desbordamiento de los ríos, sacar de sectores alejados a personas heridas por picaduras de serpientes, complicaciones en partos, fotografiar y detectar posibles plantaciones de coca y laboratorios de procesamiento de alcaloide, apoyar desde el aire en la búsqueda de personas extraviadas o arrastradas por la corriente de los ríos y patrullajes diarios.

Richard Almeida, subjefe de la Unidad Aeropolicial en Shell, señaló que el SAP tiene una relación directa con la comunidad. La misma que permite atender de forma inmediata un llamado de auxilio, a través de radio. Muchas de las comunidades se encuentran en sectores aislados en los que una avioneta no puede aterrizar, por eso el helicóptero se convierte en el único medio de ayuda con el que cuentan los pobladores, indicó Almeida.

Muchos de los pobladores provienen de las comunidades que no hablan español, por eso el medio de comunicación entre el policía y ellos es el lenguaje universal de las señas. Con mímicas logran comprender la emergencia y trasladar a la persona al hospital de Puyo. Almeida comentó que pese a la limitación del idioma, los comuneros saben que son policías y los reciben con alegría y agradecimiento y permiten que den esa mano amiga para salvaguardar sus vidas.

Video:

Mayor cobertura

Almeida resaltó que la diferencia entre el patrullaje aéreo y el terrestre, es que al estar desde el aire se tiene una mayor cobertura del evento, logrando así observar cosas que para los gendarmes en tierra es imposible. Aproximadamente cuatro veces por semana atienden emergencias médicas y a diario realizan patrullajes aéreos.

Equipamiento e instalaciones remodeladas

El SAP en Shell cuenta con equipamiento nuevo e instalaciones remodeladas. A esto se suma ser el lugar idóneo y estratégico para aprender pilotaje. Por eso, la primera escuela de pilotaje de helicópteros de la Policía Nacional tiene su base allí con dos nuevos estudiantes. A más de eso, Toreto, un cachorro bull terrier blanco, sordo, es la mascota oficial de la unidad. Todos los miembros de Shell juegan con él y mediante lenguaje de señas lo educan.

Víctor Hugo Zurita, piloto, es el dueño del temerario can que no se inmuta con el sonido de las palas del helicóptero. Zurita señaló que siempre es una experiencia nueva, cada misión encomendada. Para él, el acercamiento con las comunidades es esencial, de esa manera se logra un trabajo coordinado y se puede aprender mucho de ellos.

Zurita lleva tres años desempeñándose como piloto en la unidad, en Pastaza. Cada día, sin importar la misión que sea, recorrer y sobrevolar la vegetación y naturaleza amazónica es increíble. Más aún si de esa manera se ayuda a las comunidades de la selva. Redacción A. V. /Quito.

Fotografías: