Saltar al contenido principal

El trabajo en equipo ha impulsado su exitosa labor frente al Comando Provincial del Azuay

Cuenca. “Estaré donde la ciudadanía me necesite, ya sea en las calles o detrás de un escritorio, porque mi vocación es servir sin importar el lugar o el puesto al que me asignen. Ese es mi compromiso con la gente y con la Policía Nacional”, señaló el coronel Marcelo Tobar, quien el pasado 6 de junio cumplió dos años al frente del Comando Provincial del Azuay, convirtiéndose en el oficial que ha permanecido por más tiempo en este cargo.

Para Tobar, alcanzar este tiempo es una mezcla de sentimientos encontrados, ya que está consciente de que su trabajo y los resultados alcanzados le han permitido mantenerse al frente de la Policía en el Azuay, pero también entiende que estos mismos factores le proyectarán en corto plazo, a un nuevo lugar, con nuevas responsabilidades y objetivos.

“Me siento orgulloso de lo que hemos alcanzado en el Azuay, estos dos años han sido muy fructíferos en el tema de la Seguridad Ciudadana, sin duda el trabajo es fuerte pero al ver los resultados todos nos sentimos complacidos, pero al mismo tiempo comprometidos en mejorar cada día”, comenta Tobar.

Para el comandante todo lo alcanzado en estos dos años es fruto del trabajo de todos. “Sería absurdo que todo este trabajo recaiga en una sola persona, la seguridad la hacemos todos los que somos parte de la Policía Nacional, desde el policía recién graduado hasta el General. Todo es trabajo en equipo”, acotó.

Su trabajo

Tobar es un hombre práctico, como él dice nada gana analizando un problema si no piensa al mismo tiempo en la solución. Por ello le gusta estar pendiente de todo lo que pasa en el Comando. Cuando no está en una reunión, recorre las instalaciones conversando con su personal, observando que todo marche bien.

La puerta de su oficina siempre está abierta y música ambiental recorre cada uno de los espacios, sus reuniones con el personal son rápidas y concisas. Los oficiales y personal a su cargo tienen el mejor concepto no solo de su trabajo sino por la apertura y confianza que genera con sus subalternos.

Este nivel de acercamiento con el personal, según Tobar, ha influido para que los niveles de seguridad en la provincia vayan en aumento mes tras mes, con los resultados a la vista de la ciudadanía.

“Desde el 2013, en Azuay, los delitos registran un descenso de forma permanente, es decir, que para el 2014 los hechos delictivos disminuyeron en un 19 % y, en lo que va del año, la reducción es del 4 % con respecto al año pasado, con una proyección de llegar al 10 %”, comentó Tobar.

Resultados reflejan el arduo trabajo

Para el coronel, los resultados no siempre reflejan el trabajo de la Policía, ya que en muchas ocasiones los delitos no responden a la falta de seguridad, sino a la falta de prevención de la personas. En Azuay se desarrolla una campaña permanente para involucrar a toda la comunidad en el tema de la seguridad.

“El pueblo azuayo es colaborador e incluyente, ya que se integra a los programas preventivos y no excluyen a nadie. Menores de edad, adultos mayores y personas con discapacidad son los primeros en interesarse en ejecutar los programas y también son los más activos”, agregó.

Video:

Un cuencano más

Para Marcelo Tobar será difícil alejarse de Cuenca si el Alto Mando lo dispone, ya que se siente un cuencano más y asegura que hasta el “cantadito” típico de los habitantes de la ‘Atenas del Ecuador’ se le ha pegado, a más de ello no esconde su preferencia por la gastronomía cuencana.

“Desde hace mucho tiempo no me imagino una mañana sin la tradicional agua de sangurache (una mezcla de diferentes hierves naturales) o los cuyes asados, el hornado o los dulces cuencanos, sin duda es una de las muchas cosas con las que Cuenca atrapa a quienes la visitan y hacen desear no marcharse”, indicó.

Tobar nació en Ibarra hace 51 años y descubrió en la Policía Nacional una forma de servicio a los demás. “No provengo de una familia con miembros vinculados a la Policía, soy el primero que optó por esta carrera, por lo que el apoyo de mi familia es fundamental en este trabajo,”, acotó.

El coronel se graduó como subteniente en la República de Colombia a los 21 años, alcanzando la primera antigüedad, y desde ese momento se inclinó por el área de Antinarcóticos, donde sirvió en las provincias del Guayas, Pichincha, Esmeraldas e Imbabura.

En sus 30 años como policía, Tobar ha sumado decenas de anécdotas, muchas de ellas las guarda para sí, porque asegura que estas le ayudan a crecer en lo personal y profesional. “Donde sea que me ubique el deber y el destino, llevaré presente que en esta ciudad de Cuenca, la participación de la comunidad fue fundamental para alcanzar las metas deseadas”. Redacción M. N. /Azuay.

Fotografías:


 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *