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Manabí cuenta con uno de los mejores policías investigativos del país

“Los caminos que tienen más obstáculos, son los que te llevan al éxito”, es el lema que lleva presente el teniente Leonardo Pijal Cazar, quien es uno de los dos mejores oficiales policías investigativos del Ecuador.

Pijal obtuvo una condecoración recibida en Quito y simbólicamente en Manabí-Distrito Portoviejo, donde es su plaza de trabajo, por sus labores desempeñadas en la Policía Judicial de la provincia durante el 2013.

Es la primera vez que el gendarme, de 28 años de edad, recibe una condecoración como esta. “Siento satisfacción al recibir esto sobre todo porque es un incentivo para seguir laborando. Mi familia se siente muy gustosa de que valoren lo que hago y sobre todo esto es un ejemplo que le puedo brindar a mi hija, para que ella también logre en su momento los objetivos que se marque”, indicó Pijal.

Fue la Dirección Nacional de la Policía Judicial quien le otorgó dicha distinción en la ceremonia de la ‘Excelencia Policial’ de los mejores uniformados nacionales en servicio urbano, proyectos de servicio urbano y oficiales investidos. Pijal sobresalió junto a la teniente Leonela Moreno como oficiales investigativos. Otros 30 clases y policías también fueron condecorados.

Para este agente cada día es una meta en su trabajo. La labor del teniente es de manejar un grupo que efectúa operaciones básicas de inteligencia para proceder a allanamientos y detenciones. “En el 2013 pude hacer gran cantidad de allanamientos para la Policía Nacional. Hubo incautaciones de drogas, de armas, detención de personas más buscadas a nivel provincial. Por ello gané este reconocimiento, pues realicé unos 30 casos aproximadamente en el 2013”, indicó, el gendarme oriundo de Quito .

Una vocación
La familia de Pijal está llena de historias contadas por sus miembros, muchos de ellos Simón clases y policías. Por ello, para este teniente no fue difícil sentirse identificado con la profesión. Sobre todo, porque su abuelo también fue uniformado y obtuvo en sus tiempos un reconocimiento por haber sido uno de los gendarmes más antiguos en la institución. En la actualidad su abuelo tiene 94 años de edad y vive en Ibarra.

Aspiración
Pijal lleva siete años ejerciendo esta profesión y su aspiración es llegar al rango de general. Sus labores iniciaron en en el grupo de tránsito de Pichincha, luego estuvo en Manabí en servicio urbano, posteriormente fue a la Unidad de Policía Judicial en Pichincha, Guayas y Manabí.

“Para uno como policía lo más satisfactorio es ver a un niño sonreír, ver que una persona recupera lo robado y dar soluciones a las víctimas en los distintos procedimientos que se nos presentan. Nadie debe olvidar que el policía también es un ser humano que se identifica con el sentir de los demás”, dijo el teniente.

Dentro de la Policía Nacional, Pijal ha realizado cursos de Policía Judicial, seminarios de manejo de informantes y escena del crimen.


 

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