Quito.- Mediante el operativo ‘Cóndor Andino’, ejecutado en las ciudades de Guayaquil, Quito, Huaquillas y Zapotillo, las autoridades policiales desarticularon una banda dedicada al tráfico de migrantes haitianos. Esta es la segunda organización desmantelada en lo que va de la semana.

Un tour con destino a Brasil, partiendo desde Haití a Panamá o República Dominicana, luego Ecuador, Perú y finalmente la tierra brasilera, era la promesa. Por el viaje, los haitianos debían pagar de 1.500 a 3.000 dólares americanos, por persona.

Así era el modus operandi de una organización delictiva de tráfico de migrantes, liderado por una ciudadana peruana, la misma que fue detenida por las autoridades en la ciudad de Huaquillas. Al mismo tiempo, miembros del Grupo de Intervención y Rescate (GIR); Policía Judicial; Unidad Antitrata de Personas y Tráfico de Migrantes; Criminalística, Migración y Fiscalía, aprehendieron a seis ciudadanos ecuatorianos, un africano de Sierra Leona y 13 haitianos, integrantes de la banda.

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Las labores de inteligencia que duraron un año, permitieron determinar el modus operandi de la banda, quienes traían vía aérea a los haitianos hasta Guayaquil o Quito y los escondían en casas de acogida durante cinco o seis días. Luego, por vía terrestre, eran transportados en grupos de 20 a 30 ciudadanos hasta Zapotillo o Huaquillas, en donde otros traficantes los ingresaban a Perú de manera ilegal.

Un total de 13 allanamientos, entre las ciudades antes mencionadas, dejaron un saldo de 36 haitianos rescatados en el sector de la Mitad del Mundo al norte de Quito. El rescate de 12 haitianos y 11 senegales en un hotel de Loja; el decomiso de dinero en efectivo, documentos, pasaportes, tickets aéreos y de buses, y recibos de transacciones bancarias.

Las autoridades indicaron que el destino escogido era Brasil, lugar en donde los ciudadanos podían obtener credencial de refugiados y trabajar. El operativo contó con la colaboración del Ministerio de Inclusión Económica y Social (Mies), quienes verificaban el estado de las víctimas para ser trasladadas a una casa de acogida. / Redacción Quito.
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