Quito.- Una Policía civil y comunitaria, que está en las calles, ganándose la confianza de la ciudadanía, la recuperación de la institucionalidad de esa misma Policía, y un modelo desconcentrado de gestión policial, articulado con la actuación de una justicia independiente, son asumidos como los factores claves para que actualmente Ecuador sea considerado como el país de mayor crecimiento en la percepción ciudadana sobre seguridad en Latinoamérica, según un informe internacional publicado por la empresa de análisis Gallup.

Los argumentos fueron planteados la mañana de este jueves por el Ministro del Interior, José Serrano, durante una entrevista en la televisora CNN en Español. El principal del Ministerio del Interior indicó que la implementación de esas políticas, junto a un proceso planificado y técnico de dotación de infraestructura y tecnología para la Policía, así como el mejoramiento de las condiciones laborales y operativas de los policías, han permitido ubicar a Ecuador como uno de los países más seguros de Latinoamérica.

“En Ecuador, desde el 2010, hay un proceso sostenido para la transformación de nuestra Policía, con una serie de acciones. Una política pública de seguridad ciudadana que va dando resultados, como que nuestra tasa de homicidios por 100 mil habitantes haya descendido de 20 casos, a actualmente a una tasa de un dígito, es decir 9 casos/100 mil habitantes. Eso también es fundamental”, precisó el Ministro del Interior.

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El factor humano también ha sido trascendental para estos resultados. El Gobierno Nacional, a través del Ministerio del Interior, ha logrado implementar una política real de remuneraciones y atención a las necesidades del personal policial. “A inicios de nuestro gobierno, la Policía tenía remuneraciones de 350, 250 dólares, en el nivel de policía de línea. Este momento, un policía al graduarse y desde su primer día de trabajo tiene una remuneración de mil dólares”, señaló. Esta nueva política ha permitido que haya una mayor demanda de ingresos a la Policía Nacional, permitiendo avances sustanciales en el escogitamiento del personal que ingresa a la institución. “Hace cinco o seis años, se presentaban cinco o seis mil aspirantes a policía. Este año hemos tenido 30 mil jóvenes, hombres y mujeres que quieren ser policías”, explicó.

Serrano también se refirió a la campaña de búsqueda de Los Más Buscados, que ha posibilitado la detención de 222 (desde 2011) personas que representaban un peligro a la sociedad ecuatoriana. Con esto se logró también una mayor participación de la ciudadanía en temas de seguridad ciudadana. La estrategia se complementó con una reestructuración judicial que ha logrado un mayor y mejor tratamiento procesal de los juicios y casos abiertos para el castigo de sospechosos involucrados en delitos como asesinato, sicariato y violaciones, entre otros. “La gran parte de esos más buscados no solo están aprehendidos, sino juzgados y sentenciados, por delitos de todo tipo…”, enfatizó.

El informe de Gallup es una encuesta realizada entre los años 2009 y 2014. Se basó en tres indicadores: número de robos, confianza ciudadana en la Policía y percepción de seguridad. El Ministro del Interior mencionó que en los tres facrores, Ecuador ha logrado avances históricos que responden a políticas integrales de seguridad ejecutados por este Gobierno. “Hay otra lógica que se está dando en el país y que es la que está transformando la seguridad ciudadana de los ecuatorianos y ecuatorianas. Eso tiene mucho que ver con percepción, pero también con la realidad, con el nuevo modelo desconcentrado de gestión, con su articulación con un modelo de justicia independiente que está dando resultados, que está juzgando a quien comete estos delitos, que nos permiten tener esta disminución en todos los delitos”, mencionó el Ministro del Interior.

Futuro regional
Asimismo, Serrano mencionó la necesidad de que la región articule una agenda común sobre seguridad ciudadana. Solo dicha estrategia nos permitirá enfrentar un crimen organizado que actúa con estructuras supranacionales. “El crimen organizado ya no actúa de manera aislada en cada uno de nuestros países. Tienen estructuras similares, semejantes, que están en permanente comunicación para varios delitos, no solo para narcotráfico, para trata de personas, robo de personas, de vehículos, etc. Si nosotros logramos articular una política pública latinoamericana integral, veremos que los resultados que vamos a obtener serán fundamentales. Es que no podemos tener desniveles entre nuestras policías, no podemos tener remuneraciones diferentes, no podemos tampoco tener inversiones que no denoten la necesidad de una Policía para la gestión preventiva”, concluyó.