Personal de la Dinased recreó escena del delito

Quito. Un doble crimen se suscitó la tarde del viernes en Quito. Una mujer yacía sobre una cama, su esposo la estranguló y él perdió la vida víctima del puñal de su empleada doméstica. La responsable del segundo crimen huyó del lugar mientras algunos vecinos la observaban.
Esta es la escena que recrearon los alumnos del III Curso Internacional de Investigacion de Homicidios. Atendiendo lo descrito, pusieron en práctica todo lo aprendido durante su capacitación. El curso inició el pasado 13 de abril. Cerca de 70 investigadores de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Extorsión y Secuestros (Dinased) se especializan en dos grupos, uno de ellos concluyó su preparación con la dramatización del doble asesinato y su tratamiento a través de los protocolos de investigación correspondientes.
Los cursantes recibieron clases teórico-prácticas en varias materias, entre ellas: técnicas forenses para la recolección de indicios, grafología, necrodactilas, balística forense, criminalística de campo, siquiatría forense, entre otras.
Sus instructores fueron catedráticos universitarios de renombre en el país, instructores de la institución policial y seis docentes extranjeros provenientes de las policías de España, Chile y Argentina, todos ellos profesionales con amplia experiencia en las temáticas que abordaron.
Para el teniente coronel Fernando Pérez, jefe de la Unidad Nacional de Investigación de Muertes Violentas de la Dinased: «El contar con esta especialización de los agentes permite explorar con mayor detalle la escena de un crimen, determinar la importancia de los indicios y manejarlos apegándose a los principios técnicos que rigen la cadena de custodia. Los alumnos recibieron instrucción en aspectos técnicos en torno al cadáver y los factores que permiten establecer la posible causa y circunstancias en muertes violentas, aportando con mayores elementos de convicción a la Fiscalía y tribunales de Justicia”.
Está previsto que el segundo grupo de cursantes culmine su preparación a mediados de junio, fecha en la que se realizará la clausura oficial de la especialización. Se alcanzará entonces la especialización del 75 % del talento humano que integra la Unidad de investigación de muertes violentas.
Para el teniente Jhon Mosquera, el curso ha posibilitado dotarse de nuevos conocimientos para explorar el sitio del suceso con mayor profesionalismo y solucionar los casos en menor tiempo. Buscar a los presuntos responsables de haber cegado una vida humana demanda mucha responsabilidad, detrás de una persona fallecida en circunstancias violentas hay una familia que sufre y clama justicia. Redacción L. G. /Quito.
Video:
https://www.youtube.com/watch?v=GV63vJChe9k&feature=youtu.be