Cuenca.- Cada fin de semana el personal de la Policía Comunitaria (Polco) en el Azuay se reúne con los representantes de las comunidades y barrios, con el propósito de difundir mediante charlas e intercambio de experiencias el programa de una buena convivencia ciudadana, cuyo principal objetivo es disminuir los índices delictivos en estos sectores.

A través de estas charlas, Polco se acerca a los ciudadanos y establece mesas de diálogo en las que se exponen los diferentes problemas que se registran en un barrio o una parroquia, se identifica su posible origen y lo que es más importante se establecen estrategias para terminar con ellos.

El policía Víctor Paccha explicó que con estas charlas los ciudadanos reaccionan y entienden de que la seguridad no es un tema exclusivo de la Policía Nacional y que todos deben contribuir con la misma.

“En los sectores periféricos uno de los principales problemas son las riñas ocasionadas por el consumo excesivo de alcohol, esto no se soluciona colocando más policías en las calles, sino evitando que el licor llegue a los eventos populares y reuniones, para ello se requiere el compromiso de los propios habitantes quienes venden el alcohol”, comentó Paccha.

Brigadas

Este fin de semana, el personal de Polco visitó las parroquias de Sinincay y El Valle, lugares donde se promovió la convivencia pacífica, especialmente entre los jóvenes, quienes adicionalmente mostraron su interés por retomar programas de seguridad preventiva como las brigadas barriales.

Fausto Ávila, morador de El Valle, indicó que años atrás su padre y hermanos formaban parte de la brigada barrial, la cual vigilaba durante las noches sus barrios, pero con el transcurrir de los años esta desapareció.

“Sin duda una brigada barrial es importante, ya que a más de brindar seguridad a un determinado sector, integra a los moradores y permite establecer otro tipo de programas preventivos en beneficio de todos”, comentó Ávila. /Redacción Azuay.

Fotografías: