Cuenca.- Para continuar con el combate contra los robos a personas, la Policía Nacional en el Azuay retomó desde el pasado viernes los operativos denominados Cerrojos, implementados en lugares seleccionados de acuerdo a la georreferencia de los sectores conflictivos.

Con 40 policías al mando de dos oficiales se destinó por grupos los sectores de la Nueve de Octubre, San Francisco, Terminal Terrestre, El Sagrario, Monay y Control Sur. El trabajo operativo tuvo la finalidad de controlar el espacio para que la delincuencia no tome posesión y así evitar los robos u otros delitos.

El coronel Pablo Ramírez, jefe de Operaciones, explicó que los operativos son claves y estratégicos, porque van directo al objetivo que son los vehículos y personas, en un tiempo máximo de 15 minutos. “Estos operativos denominados cerrojos se los hacía hace un año y medio o más, ahora retomamos esta metodología para reducir aún más los índices de robo”, indicó.

Modalidad del operativo

Personal del GOM se encarga de cerrar un par de calles con sus motocicletas evitando que los vehículos y personas que están dentro de este tramo salgan. El cierre será máximo de dos a tres calles, según la congestión vehicular que presente el lugar.

Los policías tienen de 10 a 15 minutos para operar de la siguiente manera: colocan los conos en las calles y proceden a seleccionar a los vehículos para solicitarles documentos a los conductores y registrar el interior; a los transeúntes también los cachean y si encuentran entre sus pertenencias armas blancas, de fuego o droga, serán detenidos.

De igual manera se procede con los pasajeros de los buses de transporte público, donde revisan los asientos y objetos sospechosos. “Todo este trabajo lo realizaremos de manera sorpresiva y frecuentemente para dar seguridad y tranquilidad a los moradores y ciudadanos que transitan por estos y otros sectores”, acotó Ramírez.

Registro y decomiso

Durante el operativo efectuado el viernes, se decomisó algunos productos de fuegos artificiales en la plaza San Francisco, ya que es prohibida la comercialización y manipulación de los explosivos. Mientras en la Nueve de Octubre decomisaron una botella con licor a un ciudadano que libaba en la plaza, con el fin de evitar alguna gresca.

Efraín Proaño, ciudadano que transitaba por la Nueve de Octubre, manifestó su agrado ante el operativo sorpresa. “Ver a los policías revisando los carros, a las personas y subirse a los buses da una confianza caminar por estas zonas. Me parece excelente que retomen la vigilancia en el interior de los buses, porque ahí es donde más problema hay con los robos”, comentó.

Los comerciantes informales también fueron inspeccionados, ya que según denuncias ciudadanos, ellos son quienes expenden licor artesanal a las personas que permanentemente se observa en esta etílico en el lugar. /Redacción Azuay.