Cuenca.- Con un personal de 30 uniformados, la Policía Nacional en el Azuay resguardó esta mañana la integridad de maestros y funcionarios públicos del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, quienes notificaron el traspaso de la administración de los Fondos de Cesantía del Magisterio (FCME) al Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (BIESS).

Los uniformados llegaron desde tempranas horas y se ubicaron en los exteriores del local del FMEC, ubicado en el Centro Histórico. Se tenía previsto el arribo de funcionarios del BIESS para cumplir con el trámite que se desarrolla a nivel nacional.

Al igual que los miembros de la Policía Nacional, alrededor de una docena de personas que se identificaron como funcionarios del FCME y simpatizantes, intentaron impedir que la notificación se ejecute, incluso se ubicaron en la puerta de la institución, obstaculizando el paso del personal del BIESS.

Notificación

El teniente coronel Pablo Naranjo, jefe de Operaciones de la Policía en Azuay, indicó que el resguardo policial se dio desde la noche anterior, cuando se conoció a nivel nacional de la notificación. “Anoche enviamos contingente policial para evitar algún incidente, pero todo se llevó a cabo con normalidad. Hoy aumentamos el resguardo ante la presencia de funcionarios y maestros. Afortunadamente, las dos partes mantuvieron la compostura y no se produjeron inconvenientes”, comentó Naranjo.

La Policía permaneció en el lugar hasta que las personas se retiraron. Las puertas de la edificación estuvieron cerradas como parte del proceso. Los representantes de la UNE manifestaron que regresarán al lugar para continuar con la protesta.

Naranjo aseguró que la vigilancia abarca la seguridad de los asistentes y ciudadanía en general, por lo que descartó que la Policía quiera oponerse al derecho de la manifestación. “Nuestra labor es brindar seguridad y mantener el orden en cualquier situación”, acotó el oficial. Redacción M. N. /Azuay.

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