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Seis detenidos involucrados en explosiones en la Universidad de Guayaquil  

BOLETÍN 025

Guayaquil, 18 de septiembre de 2019.- Cuatro meses de investigaciones llevaron a la Unidad de Inteligencia Antidelincuencial (UIAD) de la Policía Nacional, a la desarticulación de un grupo sospechoso de haber accionado una serie de seis explosiones en las inmediaciones de la Universidad de Guayaquil, ubicada en el centro norte del Puerto Principal.

Así lo dio a conocer esta mañana, en rueda de prensa la Ministra de Gobierno, María Paula Romo, quien estuvo acompañada por el presidente de la República, Lenín Moreno; el rector del centro de educación superior, Roberto Passailaigue; la fiscal Provincial, Yanina Villagómez; entre otras autoridades policiales y de educación superior.

En su intervención el Primer Mandatario hizo un llamado a fiscales y jueces para que se sancione a los responsables de estos actos delincuenciales. “En la Universidad de Guayaquil se habían percibido muchas irregularidades, ineficiencias y por qué no decir también seguramente actos de corrupción, por eso fue un acierto designar al doctor Passailaigue, aseguró”.

Resaltó que en el momento en que se empezó a afectar intereses creados, comenzaron los ataques. Indicó que, sin duda, los violentos deben estar vinculados a cierto grupo político que prefirió no mencionar. “Esperamos que el sistema de Justicia de la respuesta que estamos esperando y determine si las personas son culpables o son unos angelitos que salen nuevamente a la calle y reinciden en sus actos delincuenciales”, expresó el presidente Moreno.

De su parte, la ministra Romo indicó que tanto Fiscalía, como Policía han actuado de manera acertada frente a estos eventos que han alarmado al sector universitario y a la ciudad de Guayaquil, donde entre la noche del martes y madrugada del miércoles se efectuaron 8 allanamientos y se detuvo a seis personas que serán investigadas por el delito de terrorismo, que según indicó la fiscal Villagómez, se sanciona con penas de 10 a 13 años de prisión.

En tanto el rector del centro de estudios resaltó la labor de la Policía y agradeció la gestión realizada desde el Ministerio de Gobierno. “Esto es el punto de un ovillo, porque existe delincuencia organizada al interior de la Universidad”, expresó Passailaigue, a la vez que destacó el apoyo de las distintas entidades para el proceso de saneamiento al que está siendo sometida la institución.

También remarcó que quienes están en contra de su gestión equivalen solamente al 0,001 %. “Seguramente han de ser los que están vinculados a hechos de corrupción”, manifestó.

Según información de la Policía Nacional, durante ocho allanamientos, realizados en viviendas ubicadas en distintos sectores de Guayaquil, se detuvo a Washington P., de 66 años, quien habría detonado los artefactos explosivos junto con su hijo, Joshua, de 28 años. No registran antecedentes policiales ni judiciales; Cristhian F., de 25 años, activista político y exestudiante de la Facultad de Periodismo. Tenía información de dónde estaban ubicadas las cámaras de seguridad en el centro de estudios superiores.

El grupo de detenidos también lo integra Daniel C., de 40 años, registra 1 antecedente penal y 5 procesos judiciales. Activista político expulsado de la Facultad de Comunicación; Víctor P., de 32 años, no registra detenciones ni procesos judiciales, colaborador de Cristhian F, encargado de la logística y transporte; Felipe B., de 54 años, ingeniero químico, registra 02 antecedentes penales: Falsedad en la identificación e intimidación. Sería el encargado de proveer los insumos y armar los explosivos en su domicilio por los conocimientos adquiridos en su profesión, como químico.

A esta banda sospechosa de terrorismo se les incautaron 111 cartuchos de diferentes calibres, 43 cápsulas detonantes no eléctricas, dos fragmentos de mecha lenta de seguridad, un taco de dinamita en gel, un frasco con clorato de potasio, una granada de mano, tres envolturas de papel con una sustancia gris y mechavartesanal, un artefacto explosivo improvisado (componentes: seis tacos de dinamita, una cápsula detonante no eléctrica cebada a mecha de seguridad de 53 cm de longitud), una camioneta, seis celulares, una laptop, prendas de vestir y documentos.